lunes, 16 de marzo de 2009

ENTENDER UNA ENFERMEDAD MENTAL



Las enfermedades mentales son trastornos de las funciones y la química del cerebro. Las enfermedades mentales incluyen trastornos como: esquizofrenia, trastorno esquizoafectivo, trastorno bipolar, trastorno depresivo mayor, trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno de ansiedad, autismo, trastorno penetrante del desarrollo y trastorno de déficit de atención hiperactiva. Las enfermedades mentales pueden ser heredadas por medio de tendencias genéticas, se dan por un estrés extremo, pueden ser el resultado del abuso severo de substancias dañinas, o pueden ser debidas a una lesión. A menudo son el resultado de una combinación de los factores mencionados.

Las enfermedades mentales pueden afectar a cualquier persona. Los procesos químicos cerebrales de un individuo con una enfermedad mental son diferentes de los procesos de una persona que no tiene dicha enfermedad. Debido al aspecto biológico de estas enfermedades, los medicamentos tienen un papel muy importante en el tratamiento de aquellos con enfermedades mentales severas y su uso correcto es tan esencial como lo es el uso correcto de la insulina para un diabético.

Las enfermedades mentales trastornan, ya sea leve o severamente, la manera de pensar, percibir o sentir, así como el comportamiento, dando como resultado una variedad de síntomas. Cuando los síntomas son severos, tales como la confusión de los pensamientos, los cambios severos de humor o el perder el contacto con la realidad, la vida diaria queda interrumpida. En determinados casos la terapia a largo plazo y el uso de medicamentos llegan a ser necesarios. Las enfermedades mentales menos severas sólo requieren terapia a corto plazo, pero es poco común que se necesite un medicamento.

Se debe consultar con un terapeuta para determinar el tipo y el nivel de severidad de una enfermedad mental.

INDICADORES DE ENFERMEDAD MENTAL

Daño causado a sí mismo, como provocarse cortes
Hablar sobre la posibilidad del suicidio
Depresión prolongada o severa
Problemas físicos provocados por la tensión
Preocupación y ansiedad permanente y sin motivo.
Apartarse de la familia o sociedad
Abuso de alcohol y drogas
Pensamiento confuso o desordenado
Alucinaciones o ideas delirantes
Miedos injustificados
Obsesiones o compulsiones
Emociones inadecuadas
Aumento o pérdida de peso rápido y sustancial
Dormir demasiado o demasiado poco
Egocentrismo excesivo
Pérdida de conexión con la realidad
Incapacidad de mantener buenas relaciones interpersonales
Comportamientos y creencias religiosas raros
Sentimientos de remordimiento y culpa excesivos.
Sentimientos/estados de ánimo de euforia o depresión extremos
Incapacidad de sentir el amor Sentimientos de ira profunda
Incapacidad de ocuparse de las necesidades personales de uno mismo
Incapacidad para manejar sus responsabililidades o solucionar sus problemas en la escuela, la iglesia, el trabajo o el hogar

No hay comentarios:

Publicar un comentario